Abrazando La Autenticidad: En la trayectoria de mi carrera, he optado deliberadamente por el camino menos transitado. He tomado una decisión: a ser yo misma abiertamente y sin pedir disculpas, al mismo tiempo que fomente una perspectiva auténtica y positiva. ¿Y el resultado? Un viaje que ha sido muy enriquecedor.
En medio de un mundo que a menudo defiende la conformidad, descubrí la tranquilidad de permanecer fiel a mí misma. Es cierto, algunos podrían argumentar que carezco del arte de fingir para agradar, sin embargo, he llegado a comprender que los riesgos vinculados a la honestidad sin reservas son inconmensurables.
¿Por qué? Porque me aferro a la creencia de que el equipo adecuado, la combinación perfecta y el momento oportuno armonizarán con mi camino a su debido tiempo. A lo largo de esta odisea, rechazo rotundamente cualquier compromiso con mis principios cristianos y fundamentales asi no promover una desviación de mi esencia. En última instancia, me enfrento a mi reflejo cada noche, sabiendo que me he mantenido fiel.
Claro, me he encontrado con escépticos que escudriñan mi enfoque. Me han puesto obstáculos, fomentando el cumplimiento de normas. Sin embargo, les recuerdo que cada amanecer me presenta mi verdad, una verdad donde reina mi suprema fe en Dios y la fidelidad de mantener mi identidad propia. He tratado de cultivar una práctica de bondad, especialmente en entornos profesionales donde puede ser extremadamente desafiante, donde el respeto es primordial, mientras que en el mundo espiritual trato de amar a los demás, incluso si mi amor nunca será como Jesucristo me ama.
En un mundo que ocasionalmente aboga por la mascarada y el ocultamiento para ser auténtico, he forjado un camino distintivo. Priorizo escuchar antes que emitir juicios, buscando siempre una oportunidad de ser de bendición para los demás o motivar a quienes necesitan aliento.
Elegí conscientemente la autenticidad sobre la conformidad, y este viaje ha revelado conexiones que tocan una fibra más profunda, personal, profesional y espiritualmente.He tenido el privilegio de fortalecer mi confianza en mí mismo porque he aprendido a confiar más en Dios y no poner mi confianza en los hombres. Fomentar un entorno en el que Dios me dé permiso para ser yo mismo ahora, y no tener que ser como nadie aquí en esta tierra, excepto para ser más como nuestro Señor y Salvador, Jesucristo.
En mi viaje, la fe en Dios y mi fe en Jesús han sido mis firmes compañeros, ayudándome a superar los desafíos de la vida y permanecer fiel a mí misma. En medio de las incertidumbres, encuentro consuelo en saber que Dios está a mi lado. Cuando la duda me rodea, mi fe permanece inquebrantable.
A lo largo de mi camino, me he encontrado con momentos en los que otros podrían haber dudado de mí, pero la presencia inquebrantable de Dios nunca vaciló. En mis días más difíciles, es mi fe la que me da fuerza, infundiéndome resiliencia incluso en momentos de debilidad. Tener una confianza inquebrantable en Dios me empodera para resistir los retos.
Cuando las circunstancias parecen insuperables, recurro a la seguridad de que Dios puede lograr lo que yo, por mi cuenta, no puedo. Esta seguridad en Dios es mi manantial de fortaleza. A mis compañeros de viaje, recuerden que la fe tiene el poder de elevarnos y fortalecernos. En tiempos de incertidumbre, encontramos fuerza y coraje a través de la luz inquebrantable de la fe. Cuando surjan desafíos en tu vida, ten claro que fe puede ser la piedra angular sobre la cual se construya tu determinación.
*** Escríbeme a mi correo electrónico: info@lamotivadora.com
*** En proceso de construcción y rediseño de mi sitio web ---- ¡Nuevo diseño próximamente!
🌐 "El Señor es mi fuerza y mi escudo; mi corazón en él confía; de él recibo ayuda. Mi corazón salta de alegría, y con cánticos le daré gracias." - Salmos 28:7 🌐